sábado, 3 de octubre de 2009

Te prefiero en la almohada.

Estamos en las mismas,
con ganas y con menos.
Y no tienes ni la menor idea de como me siento.
Sin ti.
Sin.

Abril, que gran mes.
Y lo cierto es que no sé cuándo empecé a quererte.
No importa,
todos los meses son buenos.
Y empieza el frío,
entonces es cuando necesito de tu calor.
en mi cama,
o en la tuya.
En un cuarto de baño,
o encimadeti.

Fuguémonos.
A Marte. Venus.
Saturno.
¿Sabías que en Saturno hay sesenta lunas?
y que mejor forma de ponerle
las otras nueve nosotros dos.
De qué forma ni hablemos.
Empezando por los besos.
¡No se hable más!

Aguentemos un poco más,
sólo un poco.
Y cuando te decidas,
cámbiate de dirección,
múdate.
A mis piernas.
No me digas que no.

Y es que, en el fondo, con ganas,
con mudanzas,
con fugas,
sin saturno y sin sus lunas,
con Venus tal vez
oxidada,
sin calendarios,
con 14.
con tu vida,
con la mía,
con la de todo un poco,
lo mío,
lo nuestro,
lo tuyo.

En el fondo de cada párrafo,
puedo decirte que sí.
Que los cafés saben mejor con canela, azúcar
y si es para dos.

Lo que nunca te digo es que te quiero,
y joder, lo hago.
Imbécil.

Llévame a París. Me lo debes.

1 comentario:

  1. chica a mi un hombre me escribe lo que tu acabas de escribir y no te llevo a Paris, pongo Paris a tus pies

    muakkkk

    ResponderEliminar