domingo, 23 de agosto de 2009

A veces la vida se me vuelve del revés.
Se me riza.
Se congela otras tantas.
Y de repente, tiene ese color de mis sábanas.
Un poco más tirando a caoba.
Y sin que te des cuenta, mi vida detrás de tus orejas.
Pero tú siempre te das cuenta de todo,
lo que ocurre es que no dejas verlo.
Y así es un poco más difícil.
Luego, sin quererlo o queriendo, no lo sé, lo sacas.
Poco a poco.
Y mi sonrisa en tu boca.
Que para perseguir a lo difícil, ya persigo a la vida.

¡Oh! casualmente tú eres vida.

Y a mí me encanta lo difícil.
Cuéntame como lo haces. El que te persiga y me gustes tanto.


Una vez me preguntaron como era mi Primavera en verano.
Y como quién no quiere la cosa, preguntaron como era yo en Primavera.


Yo soy Octubre.
Me llamaron bonita.
Desde entonces mi Primavera es en Octubre.
Y yo soy Primavera.

Es imposible no dejar de sonreir cuando estas entre medias.

Lo que ocurre es que el verano es más para quejarse,
a pesar de vivir más haciendo el amor.
Te quejas de lo bonito que son los días,
porque sabes, que algún día, nosabescuándoniquieressaberlo,
te encontraras en la parte más bonita del mundo. Solo.

Así que, por quejarte,
te quejas antes.

Yo lo llamo una forma de sobrevivir.

Pero aún queda tiempo.
Tiempo para seguir haciendo el amor.

Luegoyaseveráloqueocurreconeltiempo.


Como siga así,
nuestras vidas se rizaran a la vez.

1 comentario:

  1. No me canso de leerte, de leer tu forma de escribir, no es q lo hagas bien, ni lo hagas mal, es q lo haces tuyo, lo haces tan tú que hija dan ganas de besarte desde el cuello a los pies ( sin mariconadas eh?)
    En serio eres genial

    muakkkk

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